Propóngase las siguientes 10 acciones fundamentales, y su empresa logrará tomar el control de los precios de venta e impulsará la rentabilidad. ¿Se anima?

diez

  1. Utilizaré al costo sólo para conocer el piso de los precios y la rentabilidad, nunca para definir el precio.
  1. Cuando un cliente cuestione mi precio, antes de ofrecer un descuento o dejarlo ir, me aseguraré que ha comprendido el valor diferencial de mi propuesta.
  1. Si mi propuesta no tiene valor diferencial respecto de los competidores principales, pensaré en formas de innovar para diferenciarme.
  1. Aplicaré precios a la medida de cada cliente, sin irritar a nadie, utilizando herramientas de segmentación de precios basada en el valor.
  1. Premiaré a aquellos vendedores que aporten mayor rentabilidad, no solo volumen.
  1. Analizaré formas inteligentes de comunicar el precio: cómo se lo transmite es tan importante como el precio en sí.
  1. Definiré reglas claras para  preservar la rentabilidad en el canal de ventas: cuáles son los precios y descuentos sugeridos, y los controlaré en forma permanente.
  1. Analizaré anticipadamente el impacto de dar un descuento o hacer una promoción.
  1. Compararé mis precios sólo con los de aquellos competidores que apunten al mismo segmento de clientes.
  1. No confiaré sólo en la intuición: utilizaré una metodología profesional para definir los precios (¡Sí existe!).